LOS INMIGRANTES Y LOS SALTOS A LAS VALLAS FRONTERIZAS. ¿HAY ALGUNA MANERA REAL DE SOLUCIONAR ESTA PROBLEMÁTICA?

Noticia nacional. Jmg 

La llegada de inmigrantes a nuestro territorio a través de pateras o directamente saltando las vallas fronterizas es una realidad que no cesa. Hay momentos o períodos de tiempo, en los que el flujo de inmigrantes parece mitigar, y otros en cambio, en los que se realizan de forma masiva y continuada.

Aunque muchos quieran cerrar los ojos ante esta problemática, se deben buscar soluciones reales y eficaces ante este gran asunto de estado, el cual lleva mucho tiempo siendo un lastre y una patata caliente, para todos los gobiernos españoles que han querido gestionarlo, sin ningún tipo de éxito.

Empezaré diciendo que me parece un problema complicado y muy difícil, y que se tome la solución que se tome, nunca todas las partes estarán totalmente de acuerdo. Voy a exponer como personalmente veo este asunto tan delicado, y no pretendo contentar a todos con dicho análisis, pero sí por lo menos, que reflexionen todos los implicados en esto, con eso me conformaría más que de sobra.

Parece de Perogrullo, pero un inmigrante que intenta llegar a España en una patera repleta de gente, donde existe una posibilidad más que alta de morir en el mar, o saltado una valla, donde lo más probable es que se lesione, sea detenido y devuelto de nuevo, es que no tiene nada absolutamente que perder. Esa persona, de donde procede, no tiene ningún motivo para quedarse, porque no ve posibilidad de futuro allí, por la situación nefasta que tienen, y por eso prefiere arriesgar todo, hasta su propia vida, para poder tener una mínima probabilidad de poder encontrar algo mejor aquí.

Dicho esto, evidentemente España como cualquier otro país civilizado no puede admitir a todos los inmigrantes que quieran entran en nuestro país. 

Sólo los inmigrantes que realicen todos y cada uno de los trámites legales y correspondientes para ello, tendrán una cabida reglamentaria en nuestro país. El problema reside en todos aquellos que por una necesidad abrumadora, y por una desesperación suprema, intentan entrar en España de una manera ilegal. En esos casos, me gustaría puntualizar una serie de cosas, que creo que son vitales para poder buscar posibles soluciones.

Decir que si pertenecemos a la Unión Europea, pertenecemos en lo bueno, y en lo malo. Y Europa debería y de una forma totalmente prioritaria tener una ley de inmigración totalmente consensuada por todos los países, donde sería de obligado cumplimiento, y donde todos los países tuvieran una misma postura política ante este conflicto social. En este mismo ámbito, una política Europea consensuada de ayuda a los países destino, contribuiría en ayudar a buscar soluciones en el flujo de inmigrantes ilegales.

No voy a entrar si en ese consenso, se tendrían que abrir un poco el margen ante la entrada ilegal de inmigrantes, siendo mucho más tolerantes ante dicha llegada, y siendo más permisibles ante su posterior devolución. O si por el contrario, se debería ser mucho menos tolerantes, más rígidos y contundentes, dejando muy claro las leyes, y sin apenas que los inmigrantes tengan margen de maniobra.

Todo esto lo tendrían que valorar en su justa medida todos los países, llegando a un acuerdo por mayoría, pero teniendo claro que es una problemática social enorme gravísima, que afecta tanto a los países de origen, como los de destino.

Si al final se llegará realmente a un acuerdo Europeo en este aspecto, se solucionarían muchos problemas, porque primero los inmigrantes tendrían muy claro las consecuencias de querer entrar en un país miembro de forma ilegal, y los derechos y obligaciones al hacerlo, la policía española sabría hasta donde termina su responsabilidad y que pueden hacer de forma legítima respaldados por la ley, y tercera no habría nichos legales, o huecos en la ley de inmigración, donde dependiendo de cómo se interprete pueda beneficiar a las posturas del gobierno español en cuestión, como puede ocurrir con las “devoluciones en caliente”.

Si todo está claro, definido, nítido y consensuado por todos los países, todos lucharán de la misma manera ante esta problemática. La cuestión como he dicho antes, reside en saber hacía donde tenemos que movernos, hacía más libertad y flexibilidad, o hacía más contundencia y rigidez.

Jmg (fuente imagen, rtve.es)