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nacional. Jmg
José Luis
Rodríguez Zapatero mientras España seguía inmerso de lleno en la crisis
económica, y sin haber absolutamente ningún criterio objetivo o dato positivo
real de consistencia al que poderse agarrar como clavo ardiendo, tuvo el
descredito, la ofensa, y el poco tacto hacía toda la sociedad española, de
proclamar a los siete vientos, que en España existían los famosos, “brotes
verdes”, y que salíamos ya de la crisis económica.
En ese
momento a todos los españoles se nos mintió por segunda vez en lo que
llevábamos de crisis económica y financiera. La primera vez que a la sociedad
española el gobierno presidido por Zapatero, nos mintió de gravedad respecto la
crisis económica, fue cuando nos estuvo negando de forma reiterativa,
compulsiva y hasta ridícula la existencia de la misma crisis.
Zapatero era
incapaz de hasta mencionar la palabra “crisis”, utilizando todo tipo de
sinónimos con tal de no utilizarla. España ya notaba más que de sobra las primeras
consecuencias de la crisis, y poco a poco la estábamos sufriendo de primera
mano, y nuestro gobierno seguía negándola sin más, sólo porque electoralmente le
interesaba hacerlo.
Menos mal,
que por lo menos la población española fuimos sensatos, y decidimos que no nos
siguiera gobernando dicha persona con sus súbditos, y que no siguieran
tratándonos como imbéciles o inútiles, a los que se les puede mentir y manejar
a su antojo sin problema alguno.
Mariano
Rajoy, nos prometió el oro y el moro en las últimas elecciones generales.
Prometió que nos bajaría los impuestos, que la presión fiscal disminuiría, que
el número de desempleados bajaría de una manera notoria y sustancial, y que en
reglas generales saldríamos de la crisis, y que en España no volvería a existir
corrupción de forma sistematizada.
Esa fue la
tercera gran mentira que a los españoles nos quisieron vender durante esta
maldita crisis, aprovechando que estábamos en campaña electoral, todo valía y
todo colaba, y más cuando el gobierno anterior lo había hecho fatal. Los cantos
de sirena de Mariano sonaban de maravilla, había que trabajar y sufrir, pero
nos decían que al final todo merecería la pena, y que estaríamos mejor que antes.
Nos hemos
apretado el cinturón más y más durante esta legislatura, que ya no tenemos más
agujeros para hacérnoslo más estrecho, y vemos que no hemos mejorado, nos
cuesta prácticamente igual poder respirar, el que puede, porque ya hay muchos
españoles, que se bajaron ya los pantalones del todo, y tiraron la toalla.
Y hace poco
tiempo, el que todavía es nuestro presidente de gobierno, Mariano Rajoy, nos
volvió a estremecer diciéndonos que la economía española estaba creciendo con
“raíces vigorosas”. Esta fue la cuarta gran mentira de la crisis contada a
todos los españoles. Sinceramente
no sé si los políticos y los dirigentes de los dos partidos que nos han
gobernando durante estas últimas décadas, que no han sido otros, que el PSOE y
el PP, consideran a la ciudadanía que tenemos un nivel cultural básico, o directamente
nos tratan como tontos.
Es increíble
que ahora nos digan que estamos saliendo de la crisis de una manera fuerte,
vigorosa, y con raíces donde agarrarse, y que nos lo tengamos que creer, como
el que dice que está lloviendo caramelos, y debemos de creerle sin más. La gente de
a pié, la gente de la calle, la gente que tiene que pagar religiosamente, su
hipoteca todos los meses, la factura de la luz, la del gas, los libros de texto
de sus hijos, o llenar el depósito del coche, saben perfectamente que en su
momento estábamos de puta pena, y nos decían que había “brotes verdes”, y que
ahora seguimos de básicamente de pena, y que ni mucho menos existen ni raíces,
ni nada donde poderse agarrar. Por no haber, no hay ni árbol.
El
distanciamiento de los políticos de estos dos partidos con la sociedad es tan
sumamente alto, que no tienen ni idea de la situación real que existe en el
país. La microeconomía debió ser una asignatura que debía tener mucho más valor
que la macroeconomía. Y saber subsanar dentro de lo posible, los problemas
diarios y cotidianos de la población, debería ser la prioridad número uno de
nuestros políticos.
En su
momento Zapatero pagó electoralmente porque se lo ganó a pulso con su total
incompetencia, y el tratar de mentirnos, y ahora a Rajoy le debería pasar tres
cuartos de lo mismo. Sinceramente, creo que tanto el PSOE como el PP no tienen
ni la menor idea de la “ostia electoral” que se les viene encima. Ni por asomo
se pueden hacer una previsión de todos los votos que van a perder.
El problema
reside en quién va a recoger esa multitud enorme de votos. Saber manejar todo
ese electorado descontento, al que se le ha mentido, y que ahora se encuentra
totalmente desilusionado, frustrado, y se siente impotente, será la cuestión
primordial. Personalmente lo único que pido como un desempleado más de este
país, es que no vuelva a existir una quinta gran mentira de la crisis a los
españoles, con ese poquito ya me conformo.
Las mentiras de los politicos con la crisis son innumerables.
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