España. Jmg (noticia
publicada el 29/04/2014 en el mundo.es)
Por primera
vez, según los datos registrados en el 2013, el número de desempleados de nacionalidad
Española que acuden a Cáritas, supera al de inmigrantes. Esta Ong tiene
programas de Empleo, para ayudar a todas las personas desempleadas a buscarlas
un trabajo digno, con el que poder sacar adelante a familias enteras, que
dependen de ese salario.
La mejor
manera que Cáritas intenta que todos los desempleados que acuden a sus
organizaciones puedan tener más posibilidades de poder tener una oportunidad en
el mercado laboral, es con la formación de dichas personas.
Se ha
invertido la tendencia, y parece que cada vez son más los españoles que visitan
a Cáritas con la esperanza que les pueda ayudar en la inserción laboral. En
contra, el número de inmigrantes ha perdido peso, respecto el número total de
las personas que acuden a Cáritas.
El motivo de todo esto es simple y llanamente en que esta crisis económica que
está sufriendo España desde hace ya más de cinco duros años, está afectando
desde hace dos años más o menos, con todo su apogeo a la que era antes “la
clase media Española”.
Es una
noticia desalentadora, y su análisis nos hace pensar, que en un primer momento,
la crisis golpeó sobre todo a las personas que peor lo estaban pasando,
personas que ya de por sí tenían pocos recursos, o personas que no tenían una
red social o familiar que les pudiera ayudar, entre otros, muchos inmigrantes
residentes en nuestro país.
Pero transcurridos
más o menos los primeros cuatro años de la crisis, está comenzó a centrarse más
duramente en otras clases sociales más pudientes y con más recursos económicos
a priori, que han ido aguantando como han podido sobrevivir a esta crisis, pero
que ha llegado un momento en el que también ellos se han visto desbordados, y absorbidos
por la vorágine del desempleo, de los ERES indiscriminados, de los despidos sin
concesiones, y del cierre de empresas.
Muchas de
estas personas son madres y padres de familia de más de 40 años, con grandes
experiencias profesionales, pero que al día de hoy, las posibilidades reales de
poder encontrar trabajo de una manera continuada, pudiendo ser de nuevo útiles
a la sociedad, es más bien escasas.
Sinceramente
no sé si estaremos saliendo o no de la crisis. Los datos macroeconómicos dicen
que estamos mejorando muy ligeramente, pero los que vivimos en el mundo real, y
vemos día a día los problemas cotidianos, podemos afirmar, que no estamos
mejorando, sino que todavía estamos yendo hacia abajo, sin saber hasta cuando
tocaremos de una vez por todas fondo.
Jmg (fuente
imagen, huffingtonpost.es)